martes, 15 de octubre de 2013

Preparación Contra el Abuso.



Ciudadano cubano, no te dejes engañar, tú puedes reunirte, manifestar públicamente tu opinión sobre cualquier asunto de importancia para ti o para los demás cubanos, y asociarte con quien tú quieras para fines lícitos y de forma pacífica. Estos hechos solo son considerados delitos en los regímenes dictatoriales. No tengas miedo, el Apóstol de la independencia de Cuba decía a los niños de América: “Libertad es el derecho que todo hombre tiene a ser honrado, y a pensar y a hablar sin hipocresía”.
Si un agente de la autoridad te pide el carné de identidad, entrégaselo, se cortés; si te ordena  montar en un auto patrulla, obedece. Memoriza el número de identificación del agente que te detiene y el número del vehículo. Nunca discutas, porque los policías no están programados para argumentar. No uses improperios ni palabras obscenas, marca la diferencia.
Si oficiales de la Seguridad del Estado  vestidos de civil se te acercan, deben identificarse previamente. Cuando personas civiles no identificadas te agreden físicamente, evita el contacto físico con ellos, pero de ser necesario, bloquea y esquiva los golpes que te lancen y empújalos por el pecho para apartarlos de ti, no los golpees ni respondas sus agresiones verbales. Lucha pacífica es lucha sin armas, de ideas, eso no quiere decir dejarse golpear a mansalva por una turba de energúmenos.
Si eres conducido a una unidad de la Policía Nacional Revolucionaria, no estás obligado a firmar ningún documento a no ser el comprobante de los objetos personales que te hayan sido ocupados. Tienes derecho a una llamada telefónica, úsala para llamar a algún familiar o amigo del que hayas memorizado el número telefónico, esta persona a su vez, debe tener los teléfonos siguientes y cualquier otro que sirva para denunciar la detención:
Hildebrando Chaviano Montes, Asesor Legal OCCD*: 8350171 y 52634154
Juan del Pilar Goberna, Derechos Humanos: 8678631 y 52783840
Juan González Febles, Director Semanario Digital Primavera: 6988238 y 52759831
*Observatorio Ciudadano Contra la Discriminación

Delitos que con más frecuencia son imputados a los disidentes:
Estado Peligroso
Artículo 72. Se considera estado peligroso  la especial proclividad en que se halla una persona para cometer delitos, demostrada por la conducta que observa en contradicción manifiesta con las normas de la moral socialista.
Propaganda Enemiga
Artículo 103.1. Incurre en sanción de privación de libertad de uno a ocho años el que:
a)      incite contra el orden social, la solidaridad internacional o el Estado socialista, mediante la propaganda oral o escrita o en cualquier otra forma;
b)      confeccione, distribuya o posea propaganda del carácter  mencionado en el inciso anterior.
Atentado
Artículo 142.1. El que emplee violencia o intimidación contra una autoridad, un funcionario público, o sus agentes o auxiliares, para impedirles realizar un acto propio de sus funciones, o para exigirles que lo ejecuten, o por venganza o represalia por el ejercicio de estas, incurre en sanción de privación de libertad de uno a tres años.
Resistencia
Artículo 143.1. El que oponga resistencia a una autoridad, funcionario público o sus agentes o auxiliares en el ejercicio de sus funciones, incurre en sanción de privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas.
Desacato
Artículo 144.1. El que amenace, calumnie, difame, insulte, injurie o de cualquier modo ultraje u ofenda, de palabra o por escrito, en su dignidad o decoro a una autoridad, funcionario público, o a sus agentes o auxiliares, en ejercicio de sus funciones o en ocasión o con motivo de ellas, incurre en sanción de privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas o ambas.
Desórdenes Públicos
Artículo 200.1. El que, sin causa que lo justifique, en lugares públicos, espectáculos o reuniones numerosas, de gritos de alarma, o profiera amenazas de un peligro común, incurre en sanción de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas o ambas.
Asociaciones, Reuniones y Manifestaciones Ilícitas
Artículo208.1. El que pertenezca como asociado o afiliado a una asociación no inscripta en el registro correspondiente, incurre en sanción de privación de libertad de uno a tres meses o multa hasta cien cuotas.
Artículo 209.1. El que participe en reuniones o manifestaciones celebradas con infracción de las disposiciones que regulan el ejercicio de estos derechos, incurre en sanción de privación de libertad de uno a tres meses o multa hasta cien cuotas.
Clandestinidad de Impresos
Artículo 210.1. El que confeccione, difunda o haga circular publicaciones sin indicar la imprenta el lugar de impresión o sin cumplir las reglas establecidas para la identificación de su autor o de su procedencia, o las reproduzca, almacene o transporte, incurre en sanción de privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas.
Lesiones
Artículo 272.1. El que cause lesiones corporales graves o dañe gravemente la salud a otro, incurre en sanción de privación de libertad de dos a cinco años.
2. Se considera lesiones graves las que ponen en peligro inminente la vida de la víctima, o dejan deformidad, incapacidad o cualquier otra secuela anatómica, fisiológica o síquica.
3. Para adecuar la sanción, el tribunal tiene en cuenta, especialmente, el grado en que la intención del culpable coincide con la naturaleza y entidad de las lesiones causadas.
Artículo 273.1. El que ciegue, castre o inutilice para la procreación a otro, incurre en sanción de privación de libertad de cinco a doce años.
Artículo 274.1. El que cause lesiones corporales o dañe la salud a otro que, aun cuando no ponen en peligro la vida de la víctima, ni le dejan las secuelas señaladas en los artículos 272 y 273, requieren para su curación tratamiento médico, incurre en sanción de privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas o ambas.
(Nota del Autor: En el caso de que las lesiones no requieran tratamiento médico para su curación, se consideran leves según la práctica en uso.)
Difamación
Artículo 318.1. El que, ante terceras personas, impute a otro una conducta, un hecho o una característica, contrarios al honor, que puedan dañar su reputación social, rebajarlo en la opinión pública o exponerlo a perder la confianza requerida para el desempeño de su cargo, profesión o función social, es sancionado con privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cotas o ambas.
Calumnia
Artículo 319.1. El que, a sabiendas, divulgue hechos falsos que redunden en descrédito de una persona, incurre en sanción de privación de libertad de seis meses a dos años o multa de doscientas a quinientas cuotas.
Injuria
Artículo 320.1. El que, de propósito, por escrito o de palabra, por medio de dibujos, gestos o actos, ofenda a otro en su honor, incurre en sanción de privación de libertad de tres meses a un año o multa de cien a trescientas cuotas.

Esta larga lista de delitos, es usada por el gobierno cubano para mantener maniatado y amordazado el ejercicio de derechos civiles fundamentales de la ciudadanía. De algunos habrá que cuidarse para  no cometerlos, pero vale la pena correr el riesgo y poder sentirse más digno al despertar cada día.



martes, 1 de octubre de 2013

Vivir la Pesadilla.


Este 28 de agosto se conmemoró medio siglo de la Marcha por los derechos civiles sobre Washington, medio siglo del discurso del Dr. Martin Luther King Jr. conocido en el mundo entero por la frase que aún resuena como el doblar de una campana de iglesia llamando a los fieles, “Yo tengo un sueño”.
En esta ocasión, la Oficina de Intereses de los Estados Unidos en La Habana, convocó a la celebración a un grupo tan heterogéneo de personas que parecía imposible que se hubiera logrado; clérigos, intelectuales, artistas, periodistas, opositores al gobierno, amigos del gobierno, mantenidos por el gobierno y agentes del gobierno, racistas y antirracistas, homosexuales, y homofóbicos, todos revueltos saludándose, tolerándose, y hasta odiándose cordialmente.
A pesar de todo, o quizás gracias a todo, reinó la armonía, aunque como en cualquier festejo, siempre hay detalles que se salen del programa, y en este caso el detalle estuvo en la respuesta a los discursos. Fueron poco aplaudidos; ni el de Luther King, ni el de Leonardo Calvo, ni el del Jefe de la sede diplomática señor John Caulfield, ni el de Barack Obama, parecieron causar demasiado entusiasmo entre los asistentes, como si el tema de la  desigualdad  racial fuera algo poco importante o demasiado penoso para ser hablado en público.
A los cubanos les queda una larga marcha para resolver sus problemas; en primer lugar, ese ajiaco de personalidades demostró que nadie es tan  importante como pueda pensar de sí mismo, ni tan insignificante como puedan creer los demás. En segundo término, el camino a la democratización de Cuba pasa necesariamente por la solución legal, moral y material del capítulo discriminación racial, mal que les pese a algunos, y no a la inversa.


(Publicado en Primavera Digital)



Realidades Cercanas. Injusticia y Racismo.



El tema de la racialidad, o por mejor decir, el tema del racismo en Cuba, es uno que nada tiene que ver con capitalismos o socialismos y mucho menos con  siniestros intereses de imaginarios enemigos del país. Este drama, que no es un simple tema, fue ignorado en la Cuba republicana con los mismos argumentos que hoy en día esgrimen el gobierno y la prensa oficial cubana; el peligro de la desintegración del cuerpo de la nación. Quiere decir esto que la lucha contra la discriminación racial en Cuba no es algo que esté de moda, como alguien  a todas luces desconocedor de la historia ha dicho, sino que data de siglos de justicia postergada.
Aunque el gobierno de turno se preste en ciertas circunstancias coyunturales a emitir un discurso conciliador y tomar medidas más bien tibias. Para nada incomoda que en la televisión nacional se vean cada vez más rostros de tez oscura, o que haya aumentado el número de representantes de la raza negra en los órganos del Poder Popular, estos se pueden considerar logros de la lucha que llevan a cabo desde hace muchos años los miembros de la sociedad civil no reconocida por el régimen, pero que así y todo existe.
Errores, carencias –sobre todo de libertad- y horrores, han plagado el camino de la solución a problemas no tanto heredados de la colonia y la etapa republicana, sino reasumidos por la nueva sociedad que ya es vieja y achacosa. Bajo la égida de un partido político excluyente que no acaba de encontrar la solución al racismo, ni a la improductividad de los campos, ni a las villas miseria, ni a la baja industrialización, ni a la grosería y la mala educación imperantes; la unidad nacional a ultranza es un atentado contra los ideales de José Antonio Aponte, Evaristo Estenoz, Pedro Ivonet y los miles de negros masacrados en 1912 en aras de la unidad y la soberanía de la nación.
Si el racismo, como alguien dijo alguna vez, “es una naturalización de la desigualdad entre las personas”, en Cuba sobran las condiciones para que este mal perdure. La sociedad igualitaria promovida por los comunistas fracasó hace mucho tiempo y mientras las personas de raza blanca continúen como los máximos beneficiarios del poder económico y político, los de raza negra seguirán en espera de que alguien se acuerde de ellos, pero sin pronunciarse, para que no los acusen de enemigos de la unidad y del socialismo.
El discurso ambivalente de los gobernantes cubanos y sus portavoces, plantea que hay que decirlo todo para poder superar lo mal hecho, pero el que lo haga debe asumir las injurias, amenazas y persecución oficialistas y aceptar que, a fin de cuentas, las cosas van a seguir así de mal porque el  socialismo como sistema es más importante para ellos que los cubanos como seres humanos y Cuba le pertenece a un grupúsculo de ancianos y advenedizos que se encargan de que nada cambie.


(Publicado en Primavera Digital)

martes, 24 de septiembre de 2013

Viva la Paz, Pero Que no Sea la de los Sepulcros.

 

Parece que todo no va a ir más allá de una exhibición de músculos, la diplomacia montada en portaviones de Obama ha dado frutos, por ahora. A la propuesta del Secretario de Estado norteamericano de que el golpe militar podría evitarse si el dictador sirio entregaba las armas químicas, el Kremlin se apuró a recoger la señal y el gobierno sirio encontró la puerta por la que salir con un poco más de tiempo y algo de dignidad.
Una guerra nunca es deseable, pero la posición del Presidente norteamericano dejó establecido con total claridad que los abusos genocidas de un gobernante contra su propio  pueblo, no pueden ampararse en los tan llevados y traídos principios de la soberanía y la libre determinación, ambos preferidos por las dictaduras izquierdistas, árabes y otras hierbas que ni los chivos se comen.
A nadie se le ocurriría alegar que ni los vecinos, ni la policía pueden penetrar en una casa para detener la golpiza que el cabeza de familia le propina con todo entusiasmo a la madre de sus hijos en presencia de estos, solo porque la casa está a su nombre  y el los mantiene. Lo mismo pasa con Bashar Al Assad y otros, que ahora lo pensarán dos veces antes de hacer lo mismo.
Mientras los sirios eran masacrados en las calles durante más de dos años, Rusia, China y algunos gobernantes de América Latina y otras regiones del mundo, hicieron silencio, o culparon a los que caían por alzarse contra la tiranía. Nadie veía los crímenes, esos muertos no eran importantes para los amigos de Al Assad. Ahora sí, están preocupados porque Estados Unidos  decidió poner fin a  la carnicería aunque tenga que ser por la fuerza que es el único lenguaje que entienden algunos.

(Publicado en Primavera Digital)





Por fin, ¿qué se celebró?

 

Los jóvenes fueron convocados a guarachear con derroche de decibeles en el Malecón habanero. En medio de una confusión de eventos donde  algunos adoraron a Ochún, la santa diosa de los más liberales en lo que a impulsos sexuales se refiere; otros celebraron por todo lo alto el encarcelamiento de los cinco espías, que se estarán preguntando a estas horas por qué los jóvenes en Cuba estaban tan alegres mientras  ellos siguen presos; el golpe de estado a Salvador Allende en Chile y  la aciaga fecha del derribo de las Torres Gemelas en la ciudad de Nueva York también fueron celebrados en la misma estruendosa y televisada  festividad.
¿Se habrán vuelto locos los organizadores de semejante disparate?, o ¿es que en este país ya no hay lugar para la sensatez y todos los esfuerzos se vuelcan en demostrar que la alegría, el buen humor y la música acompañarán a los cubanos por más luctuosas que sean las circunstancias? Tenían razón entonces los organizadores de aquella fiestecita que entre tragos y risas esperaban la muerte del jefe supremo, mientras hacían planes para la sucesión.
Al pueblo pan y circo, diría el emperador romano, y a falta de pan suficiente, pues, más circo. Entre conmemoraciones y discursos ha transcurrido la vida de cuatro generaciones de cubanos, ya los discursos están agotados, pero quedan las marchas por la victoria, las celebraciones de  efemérides y la inalcanzable zanahoria socialista.
Para los gobernantes cubanos sería bueno que los Juegos Olímpicos y los Campeonatos Mundiales de cualquier deporte fueran anuales, y la serie nacional de pelota durara once meses, la televisión y las fiestas populares son drogas que no permiten el uso adecuado del cerebro a gran cantidad de personas que prefieren enajenarse a buscarse problemas, y se visten de amarillo cobarde para no señalarse.


 (Publicado en Primavera Digital)

martes, 17 de septiembre de 2013

Sonia, Ramón y la Dictadura.


Sonia Garro y su esposo, Ramón Muñoz, fueron asaltados en su casa por tropas de la Policía Nacional Revolucionaria y del Departamento de Seguridad del Estado (policía política), el 18 de marzo del 2012, -¿cuál es el problema de la dictadura con las primaveras?- Sonia fue herida con balas de goma y Ramón arrojado por los sicarios desde la azotea de su casa, donde se había refugiado. No estaban armados, se encontraban dentro de la casa cuando fueron agredidos, y no tenían forma de repeler la agresión injustificada y bestial.
A partir de ese momento, la vida de la pareja ha sido un calvario entre golpes y celdas de castigo, sin juicio ni derecho a nombrar abogado ya que no se habían formulado cargos hasta este mes de septiembre, año y medio después del secuestro. De pronto, la Fiscalía presenta un expediente amañado, lleno de mentiras, racismo y odio, en el que solicita la pena de 14 años de privación de libertad para Ramón Muñoz, y 10 años de privación de libertad para Sonia Garro, por los supuestos delitos de atentado, tentativa de asesinato y  desorden público en la Causa 418 del 2013.
En esta Cuba nuestra que tanto sufre, levantar el brazo para protegerse de la golpiza policial, es atentado, gritarle hijos de puta a los sicarios como única respuesta posible al atropello, es alteración del orden, y lanzar un objeto a la vía pública para llamar la atención del abuso que se comete, es tentativa de asesinato.
¿Será que todo no es más que la justificación para criminalizar el color de la piel de ambos opositores cívicos? Los cargos imputados no se sostienen ante un análisis legal serio, pero es que en Cuba el gobierno no es serio, ni la justicia es seria, la pantomima montada para castigar la dignidad de esta pareja de afro descendientes, debe ser denunciada por todas las personas honradas de Cuba y del mundo. Está bueno ya de presenciar impávidos y cómplices como el gobierno de Raúl Castro, siguiendo el ejemplo del hermano, se ensaña con los jóvenes de piel oscura.


martes, 3 de septiembre de 2013

Esquina Caliente.


 
17 Y M
La intersección de las calles 17 y M en el Vedado, es conocida por ser la esquina donde se encuentra la entrada principal del edificio FOCSA y el restaurante El Conejito, pero además, por ser una de las intersecciones habaneras más dadas a los accidentes de tránsito.
Cada año se producen en dicho lugar cinco o seis encontronazos vehiculares, con las consabidas pérdidas materiales y en ocasiones humanas. Hace unos meses, después de muchos años sin ningún tipo de señalización; se marcaron las áreas de prohibición de estacionamiento, fue colocada una señal de Pare y se trazaron las líneas para el cruce de peatones, pero… vehículos particulares, así como otros pertenecientes a las entidades COPEXTEL, ETECSA y TRANSTUR, se estacionan sobre las zonas de prohibición, limitando la visibilidad a los conductores de vehículos que transitan por la calle M, lo cual obliga a estos últimos a asomarse más de la cuenta, entorpeciendo el  cruce de los peatones y creando la posibilidad de una colisión.
Por si fuera poco, la ruta 37 de Ómnibus Metropolitanos tiene una parada oficial en esa misma intersección, por lo que con tantos vehículos estacionados a todo lo largo de esa cuadra, no queda espacio para la parada del ómnibus, el cual debe recoger y dejar pasaje en medio de la calle.
Vendría bien un agente de la policía de tránsito ubicado de manera permanente en dicho lugar, hasta que los usuarios de la vía se acostumbren a respetar las señales y esta esquina habanera deje de ser un lugar peligroso donde impera la voluntad de los que se creen por encima de leyes y reglamentos.